PRIMERA CARTA A LOS CORINTIOS, LOS DESAFÍOS DE HOY

La primera carta a los Corintios es un modelo para tratar problemas comunes que las iglesias confrontan, especialmente las nuevas, en contextos multiculturales. La iglesia en Corinto, ciudad griega notoria por su corrupción moral, había sido recientemente establecida cuando el apóstol Pablo envió esta carta. Pablo estableció esa obra durante una estadía en Corinto de unos 18 meses en su segundo viaje misionero, Hechos 18:1–17, y en poco tiempo ya las corrientes paganas de Corinto se infiltraban en la Congregación.

Actual Corinto vista desde el espacio. Este Mar Egeo, oeste Mar Jónico.

El Autor.

Como se indica en el primer versículo, la epístola fue escrita por el apóstol Pablo, cuyo papel como autor no puede ser seriamente cuestionado. La realidad de que es una carta de Pablo ha sido universalmente aceptada por la iglesia desde el primer siglo, cuando Primera Corintios fue escrita. Internamente, el apóstol afirma haber escrito la epístola, 1:1, 13; 3:4-6; 4:15; 16:21. Externamente, esta correspondencia ha sido reconocida como genuina desde el 95 d.C. por Clemente de Roma, quien estaba escribiendo a la iglesia corintia. Otros líderes cristianos de los primeros años de la iglesia que certificaron a Pablo como autor incluyen a Ignacio, 110 d.C., Policarpo, 135 d.C., y Tertuliano, 200 d.C.

Lugar y Fecha.

Es muy probable que esta epístola haya sido escrita en la primera mitad de 55 d.C. desde Éfeso, 16:8, 9, 19, mientras Pablo estaba en su tercer viaje misionero. El apóstol tenía la meta de permanecer en Éfeso para completar su estancia de tres años, Hechos 20:31, hasta Pentecostés (mayo/junio) 55 d.C., 16:8. Después él esperaba estar en Corinto, 55-56 d.C., para el invierno, 16:6; Hechos 20:2. Su partida a Corinto era esperada aún mientras escribía, 4:19; 11:34; 16:8.        

El Motivo.

Estando en Éfeso en su tercer viaje, Pablo se enteró de serios problemas en Corinto. Unos convertidos pensaban que lo que era lícito, también era aceptable, 6:12; 10:23. Continuaron con sus patrones de conducta anteriores, repitiendo los mismos pecados. Otros continuaban malentendiendo verdades cristianas debido a la influencia de enseñanzas falsas. Ellos se dieron a conocer porque decían que Cristo no había resucitado de los muertos, 15:12. Además había informes sobre las peores clases de inmoralidad sexual, 5:1; 6:15–16.

Después de un informe por los de Cloé, 1:11, y de una carta que recibió de Corinto, quizás en respuesta a una suya, 5:9; 7:1, Pablo fue movido por el Espíritu Santo a escribirles en el año 55 d.C., aparentemente por segunda ocasión, 5:9.

Pablo esperaba volver a visitar Corinto pronto, 4:19; 11:34; 16:5–7, pero mientras tanto les escribió para corregir un caso de conducta pecaminosa y para clarificar algunos asuntos acerca de los cuales los creyentes estaban en desacuerdo. El deseaba hacerles saber a sus lectores que la gracia de Dios es suficiente para corregir imperfecciones de la conducta cristiana y habilitar al individuo a vivir de una manera agradable al Señor, 15:10.

Contenido de la Carta.

Después de saludarles, 1:1–3, y de una oración de acción de gracias, 1:4–9, Pablo comienza de inmediato a enseñar acerca de la conducta que necesitaba ser corregida. En vista de serias divisiones en la iglesia, Pablo apela por unidad entre sus lectores. Enfatiza la necesidad de la unidad, 1:10–3:23, y los medios para lograrla, 4:1–21. Un caso de incesto entre ellos, que no se había corregido, se trata en el capítulo 5. El hecho de que los creyentes se llevaban unos a otros a la corte, es reprendido, 6:1–8.

En la cima del acrópolis de Corinto estaba el templo de Afrodita, diosa del amor. Las sacerdotisas, rameras del templo, laboraban durante el día en el templo y por las noches se paseaban por las calles de la ciudad en busca de clientes. El uso de sus servicios por hombres cristianos se condena en 6:9–20.

Ruinas del Templo de Afrodita. En el mismo había mas de mil sacerdotisas que laboraban noche y día ofreciendo sus servicios.

Comenzando con el capítulo 7, Pablo cambia de la corrección de conducta a considerar otros asuntos mencionados en la carta. Contesta varias preguntas acerca del matrimonio, 7:1–40. Enseña sobre el uso apropiado de la libertad cristiana, 8:1–11:1, al discutir si los cristianos debieran comer alimento previamente sacrificado a ídolos, asunto que preocupaba a los corintios, 8:1–13.

Ilustra su enseñanza con su propio ejemplo, 9:1–27, y la experiencia de Israel en el Antiguo Testamento, 10:1–11:1. Pablo describe la adoración que honra al Señor, 11:2–14:40, contestando las preguntas acerca de la apariencia apropiada de los participantes, 11:2–16, abusos en la comunión, 11:17–24, y el uso apropiado de los dones espirituales, 12:1–14:40. Concluye sus respuestas a las preguntas instruyendo sobre la resurrección, 15:1–58, la ofrenda para los creyentes en Jerusalén que estaban necesitados, 16:1–4, y sus planes de viajes misioneros, 16:5–9.

El apóstol hace un reconocimiento especial a siete colaboradores suyos que menciona por nombre, 16:10–18, seguido por los saludos finales de su propia mano, 16:19–24. Aunque esta carta contiene unas duras palabras de reproche, las líneas finales son un recordatorio de la gracia del Señor Jesús y del amor personal de Pablo por sus lectores.

Estructura de la Carta.

  1. 1:1    Presentación a los Corintios 
  2. 1:2    Sobre la Sabiduría
  3. 3:1    Colaboradores de Dios
  4. 4:1    Servidores de Cristo    
  5. 5:1    Acerca de la Fornicación      
  6. 6:1    Juicio ante los injustos
  7. 7:1    Sobre el matrimonio            
  8. 8:1    Los Sacrificio a ídolos  
  9. 9:1    Renuncia a derechos
  10. 10:1  Respecto de la idolatría
  11. 11:2  La Iglesia                  
  12. 12:1  Dones Espirituales       
  13. 13:1  El amor
  14. 14:1  Hablar en Lenguas    
  15. 15:1  La resurrección  
  16. 16:1  Saludos, Despedida  

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